miércoles, 4 de agosto de 2010

El Camino de Fran... digo de Santiago... (Etapa V)

4 de agosto de 2.010
ARZUA - PEDROUZO (19,1 Kms.)

Total kilómetros acumulados: 96 kms.
Os dejo una muestra del Camino según te vas aproximando a Santiago: ¡es increíble! Este es un grupo de ¡¡1.500 personas!! que van andando juntas. Van a reunirse con otrtos tantos italianos (sobre todo Scouts) en una ceremonia de Hermandad en el Monte do Gozo. He tardado la leche en adelantarlos, incluso me he tenido que salir a la carretera porque de lo contrario es imposible. LLevan constantemente varios coches y furgonetas de apoyo, dos coches de la Guardia Civil, una UVI móvil y lo que no sé es como se las apañan para comer y dormir, pero creo que les dan polideportivos gigantes y llevan catering propio. ¡Menos mal que hasta hoy no me he topado con ellos, porque llenan todos los pueblos por los que pasan! Por lo menos los italianos van en grupos más reducidos y "abultan" menos que éstos. Vienen organizados por la Diócesis de Madrid, aunque sé que van más grupos por su cuenta a esa reunión. Mañana me pienso pasar por el Monte do Gozo a ver si os puedo relatar algo más.

Datos del día de hoy: ¡he pagado la machada de ayer! Como estaba muy chulito después de los 29 kms., y me sentía muy fuerte, por la tarde casi no descansé y me dediqué al blog, a lavar ropa, a oir música (a todo menos a lo que debía, que es dormir y descansar, al menos un poco para recuperar al cuerpo de un esfuerzo al que no está acostumbrado).
Pues hoy, que me puse una etapa tranquila, de 19 kms., para recuperar, las he pasado canutas pues me han salido varias ampollas en dedos meñiques y otras partes del cuerpo y llevaba un dolor en el pie derecho que me hacía casi llorar a cada paso. Para colmo, tenía una sensación de fatiga que no me ha abandonado en toda la etapa y que ha hecho que se me haga más larga de lo que en realidad es.
A pesar de ir casi todo el tiempo paralelo a la Carretera Nacional N-547, la etapa me parece muy bonita y transcurre por caminos interiores, muy de umbría. De todas formas, hoy ha vuelto a ser un día nublado, ideal para caminar. Lo peor, la cantidad ingente de gente (perdón por la rima fácil), que convierte en cansino estar todo el tiempo adelantando y diciendo ¡buen camino!

A pesar de los pesares no he querido abandonar mi ritmo habitual (muy mal hecho hoy, pero es imposible no acelerar para adelantar a tanta peña levantando polvo y armando ruido) y a 5 kms. por hora de media he cubierto la etapa en 4 horas: he salido a las 8:30 y he llegado a las 12:30.
Hoy he estado parado 21 minutos en total, pero sin ninguna parada importante más que para mear, sacar fotos, esperar a que la Guardia Civil diese paso a los 1.500 para cruzar la carretera (han tardado como 15 minutos en pasar todos y los coches esperando...).
El caso es que he llegado peor y con más dolores que nunca, sobre todo por las ampollas de los dedos meñiques, que me están consumiendo la vida y hacen muy pesado andar. He decido que me los voy a plastificar con tiritas Compeed a ver si se termina el sufrimiento.

Hoy me ha impactado una placa en recuerdo de un peregrino español quien, a los 69 años, murío recorriendo el Camino, cuando tan solo le faltaba una etapa para llegar a Santiago de Compostela. ¡Cruel destino! Aunque siempre he pensado que me gustaría que la muerte me sobreviniera, ya de mayor, muy mayor, haciendo algo que me gusta mucho. Lo que vulgarmente se denomina "caer en acto de servicio", y no hecho un viejo decrépito en cualquier asilo. En fin, vamos a cosas más positivas, pero es que la placa me ha tocado un poco la fibra sensible. Debe ser que estoy un poco ñoñín...
Todos los días se me olvida deciros que, como más o menos todos los peregrinos que hemos salido del mismo sitio vamos haciendo las mismas etapas, pues llega un momento que nos conocemos y nos reconocemos entre tanta pierna, tanto macuto multicolor. Así, cada mañana saludo a la chica (es jovencita, pero cómo está la tía...): "¿Qué tal vas hoy con la rodilla, aguantas hasta santiago?". Intento no babear mientras se lo digo (más que nada porque viaja con su padre y con su madre y no le quitan la vista de encima...); o me encuentro a una chiquita que viaja con su pareja y otros amigos y que pesa más de 120 kilos y va hecha una ruina: ha perdido ya un par de uñas y se arrastra por el camino a un paso tan lento que, si lo tuviese que seguir una babosa, acabaría secándose de aburrimiento. Le pregunto por su pie y me dice que, en el siguiente bar, va a pedir unas tijeras y un cuchilo para cortar la bota (nuevas, del Decathlon) y quitarle el cacho que le va rozando el pie. Le deseo suerte y me alejo contento de no ser yo el que le molesta...
Hay otro, que me encanta, y que ha tenido una idea cojonuda para afrontar las etapas del Camino y que va con su mujer y unas amigas (no, si tonto no es...) y lleva una bici, que va empujando. Así, se hace la etapa normal con las chicas, medio andando, medio en bici y, cuando llegan al final de la etapa se monta en la bici y se desanda la etapa para ir a buscar el coche y recoger a las chicas. De esa forma pueden ir sin macutos, porque todo va en el coche. Lo que me hace gracia, y seguro que a Abe también, es que de la bici siempre cuelga una bolsa de plástico con una botella de tinto de verano, unos vasitos y un limón... No, si os he dicho que tonto no es.
Así me paso el día: voy andando fijándome en las piernas, las rodilleras, los macutos por tal o cual detalle especial y voy reconociendo a sus propietarios y compañeros de camino. Quizá no os parezca muy divertido, pero es que tampoco tengo mucho más que hacer mientras camino, habida cuenta que Abe me ha prohibido hacer propósito de enmienda, también tomar pulpo con Coca-Cola, Mar me ha prohibido hablar y tomar lilas con la Coreana, amén de "nosecuantas" cosas más que, a la que pueda, no pienso cumplir y Super y Esther todo lo dicho, más que no se creen que esté andando todo lo que digo. En fin, que mi vida es un infierno pero para eso estoy aquí: para expiar mis culpas, que son muchas, y hacer penitencia...
Me despido de vosotros hasta mañana, si es que lo cuento, y os deseo a todos felices vacaciones dondequiera que estéis unos y otros (os tengo localizados a todos menos a Abelitor, que es imposible porque es culo de mal asiento).

Por supuesto, como siempre, ahí va el detalle de la etapa:

ITINERARIO:

Desde la rúa Cima do Lugar, donde está situado el albergue público, partimos de frente hacia la empedrada rúa do Carmen. Sus soportales y fachadas revestidas de madera despiden nuestro paso por Arzúa. Por un entorno más rural bajamos hasta la fuente os Franceses, cruzamos el río Vello y llegamos de seguido a As Barrosas y su capilla de San Lázaro (Mojón 36 y Km 0,9). Bajamos hasta el río Brandeso, afluente a su vez del Iso (Km 1,8), y subimos hasta Preguntoño, aldea de la parroquia de Burres con su ermita de San Paio del siglo XVIII (Km 2,2). A la salida evitamos cruzar la N-547 gracias a un túnel y afrontamos un repecho, entre prados, cultivos de maíz y con vistas a Arzúa, hasta el lugar de A Peroxa, también de la parroquia de Burres (Km 3,3). Los eucaliptos pueblan, cada vez más, el paisaje gallego y los prados particulares, necesarios para la supervivencia del ganado y del mundo rural, se suceden uno tras otro con sus coladas familiares secándose al sol. Viajamos por pistas revestidas de hojarasca y propensas a ensuciarse a poco que llueva. Bajamos hasta el riachuelo Ladrón (Km 3,9) para alcanzar posteriormente Taberna Vella (Mojón 32 y Km 5,2).

Seiscientos metros después entramos en Calzada, de la parroquia de Burres y último núcleo habitado del Concello de Arzúa (Km 5,8). Dejamos la población cruzando una carretera de enlace y continuamos para entrar en el Concello de O Pino el último antes de Santiago. La primera población es Calle, aldea de San Breixo de Ferreiros, donde pasamos bajo un hórreo (Km 7,8). Abandonamos el núcleo tras cruzar el arroyo Langüello y seguimos por una red de pistas y caminos hasta Boavista (Km 9,3) y Salceda (Km 11,1), al pie de la N-547. Nos desmarcamos unos metros de la nacional por la derecha, pasando junto al recuerdo al peregrino Guillermo Watt, fallecido en el Camino. Regresamos más arriba al pie de la carretera y la cruzamos junto a un concesionario de maquinaria agrícola para llegar hasta Oxén, lugar de la parroquia de San Miguel de Cerceda (Km 12,5). El camino, a la izquierda de la Nacional, conduce ahora a la inmediata Ras (Km 13,1), de la misma parroquia, donde salvamos la N-547 por debajo. En este punto también pueden enlazar los peregrinos que vengan del Camino del Norte y hayan tomado la variante de O Pino. Al otro lado se encuentra ya A Brea (Mojón 23,5 y Km 13,6) y la cercana A Rabiña (Mojón 23 y Km 14).

En paralelo a la Nacional y tras cruzarla otra vez superamos con facilidad la subida a O Empalme, de la parroquia de San Lourenzo de Pastor (Km 15,3). En medio del trayecto hay un merendero con fuente y un molino de viento que recuerda al de las granjas americanas. En el alto cruzamos la carretera para entrar en la población y tomamos, a la izquierda, una pista que desciende bajo los eucaliptos. Más abajo, por un túnel bajo la N-547, tenemos la opción de pasar para visitar la ermita de Santa Irene y su fuente barroca o ir al albergue privado. Si seguimos de frente llegamos al albergue de la Xunta (Km 16,3). Gracias a una densa fronda de eucaliptos nos aislamos del ruido de la carretera, pasamos junto al Mojón 20, y evitamos de nuevo la carretera por un túnel. Un par de casas y un aserradero y más eucaliptos conducen hasta A Rúa de la parroquia de Arca (Km 17,9). Por pista asfaltada llegamos al borde de la N-547 y subimos junto a ella hasta O Pedrouzo, también de Arca y con todos los servicios (Km 19,1).

DIFICULTADES:

Acostumbrados a etapas más largas, esta jornada puede considerarse un trámite para aguardar la llegada a Santiago. La compañía de la N-547 es lo menos agradable.

OBSERVACIONES:

Para los que quieran llegar a Santiago de una tirada deben saber que desde Arzúa hay casi 40 kilómetros. Es una alternativa poco recomendable y es más lógico dividir el tramo en dos, aunque hay viajeros que avanzan unos 35 kilómetros hasta el Monte do Gozo y dejan para el último día un paseo triunfal de tan sólo 5 kilómetros. Los que opten por pernoctar en Santa Irene deben saber que no hay servicios. En los albergues de Santa Irene tienen los teléfonos del Taxi, un servicio muy utilizado para ir a cenar a O Pedrouzo, O Empalme o A Rúa.

QUÉ VER, QUÉ HACER:

  • CONCELLO DE O PINO:

Penúltimo municipio gallego del Camino Francés integrado por trece parroquias y cerca de 180 lugares. El itinerario visita, tanto en esta etapa como en la última, núcleos poblacionales pertenecientes a las parroquias de Arca, Cerceda, Ferreiros, Pastor y Pereira. El enclave más singular es Santa Irene, con su ermita dedicada a la santa mártir portuguesa y fuente barroca de aguas curativas. La capilla fue construida gracias a la aportación de dos nobles que vivían en la cercana aldea de las Dos Casas. En O Empalme -la población anterior- se puede atisbar el horizonte e imaginar las costas gallegas. O Pedrouzo, población de servicios al pie de la N-547, ofrece al peregrino todo lo necesario. Albergues, pensiones, cajero, restaurantes, farmacia, centro de salud, etc.






5 comentarios:

Álvaro dijo...

Ánimo que ya queda nada franelooo!!!!! Tómate un pulpiño a mi salud según llegues a Pedrouzo!

Franloksli dijo...

Hola, Álvaro. ¡Qué alegría, troncolega! ¿Por dónde andas? Muchas gracias por tus ánimos, pero sabes que tengo previsto llegar hasta Finisterre, así que me quedan otros 100 kms. más después de Santiago. Tengo muchas ganas de que algún día nos vayamos juntos a hacer unas etapitas (con coreanas, je, je).
Un abrazo de Fran y estudia un montón.

Mar de Loksli dijo...

Franelo, es como si te estuviera viendo: con una tremenda lucha interior durante todo el Camino, debatiéndote entre la coreana y la hija de marras, las piernas de unas y las de otras y...el escalope y el pez espada para cear esta noche. Y aunque me has prometido, con lágrimas en los ojos, que esta noche comerás pez espada en lugar del escalope...júrame por tus ampollas que lo has cumplido.

Franloksli dijo...

Pues al final lo he cumplido y me he cenado un pez espadita y unos calamares. Y cenando he conocido a unos holandeses (ella 43 años y él 55) que llevan tres meses andando desde Holanda y han recorrido ¡¡2.700 kms.!! Mañana llegan a Santiago y acaban y juran que no van a volver a andar en toda su vida, ja, ja. Ya les he dicho que yo soy un maldito mindundi y que me vuelvo para mi casa. Snif, no somos nadie. Un besito, cariño.

superop dijo...

Bueno, acabamos de venir de unos días increíbles de vuelo... y vemos que no has publicado nada desde el cuatro...

...Y encima, tu último comentario nos deja sembrados de dudas... ¿Dónde andas, si andas?

Un abrazo, incombustible Amigo...